jueves, 7 de mayo de 2015

Museo Fray Antonio Rodríguez

Museo Fray Antonio Rodríguez


DIRECCIÓN :  Plaza de Guápulo Nº 27138 y Leonidas Plaza

HORARIOS  DE ATENCIÓN : Lunes a Viernes 08:00 – 12:00 y 15:00 – 17:00

Entrada Gratuita






La actual parroquia de Guápulo en Quito tiene una larga historia que se remota a la época preincásica, cuando era un importante paso comercial.

La construcción inicial constituyó un pequeño templo de adobe, en 1587. 

En 1595, el obispo Luis López  Solís edificó una segunda capilla. La primera imagen que llegó hasta allí fue la  de la Virgen de Guadalupe. La pintura fue obsequiada por el rey Carlos V a los  primeros españoles que poblaron Quito. “El cuadro recorrió las calles de  Guápulo, en el siglo XVII, en manos del párroco José de Herrera y Cevallos. El  objetivo fue recolectar dinero para la tercera construcción del templo que se  produjo entre los años 1649 y 1693”, dice Asimbay. El padre franciscano Fray Antonio Rodríguez se encargó de la edificación definitiva. Él también construyó  los conventos de Santo Domingo, Santa Clara. 

En esos años, los moradores indígenas de Guápulo y las élites quiteñas adoraban a la pintura de la Virgen. Sin embargo, sintieron la necesidad de tener una figura  tridimensional para rendirle culto. Así se encargó al artista español Diego de  Robles la creación de la Virgen cincelada en madera. Él cinceló tres figuras: la  Virgen del Guápulo (Guadalupe), El Quinche y El Cisne. La de Guápulo fue adorada por los quiteños, que hacían peregrinajes en su honor.  

La figura principal que los fieles veneran actualmente en el retablo mayor no es la de Robles. En 1839 se produjo un incendio que destruyó parte del templo y consumió a la Virgen. En 1953, el artista ibarreño Montesdeoca talló la imagen que se venera.  Otro tesoro de la iglesia, que tiene decoraciones en alto relieve de estilo árabe, es el púlpito. Fue tallado en madera de cedro en el siglo XVIII, por el indígena Juan Bautista Menacho. Se destaca por estar empotrado a la columna y no tener anclaje en el piso, dice Celi. Contiene siete nichos, en los cuales hay imágenes de santos franciscanos. Entre ellos, San Pedro y San Ignacio de Loyola. 

El Fonsal restaura la cúpula, su pintura original es un sol que representa al dios indígena. Junto a la iglesia está el convento, edificado en 1936, que fue colegio franciscano hasta 1970 y ahora alberga a la Universidad SEK. 

El museo que está ubicado y funciona a un lado de este hermoso templo ,exhibe 12 lienzos del gran maestro Miguel de Santiago obras entre las cuales se destacan “La Inmaculada” realizada en el siglo XVII y no podemos dejar de mencionar una de sus más relevantes colecciones como “Los Milagros de la Virgen de Guápulo”.Además están las imponentes obras de Diego de Robles , Nicolás Javier Goríbar , Juan Bautista Menacho ,y el infaltable maestro Manuel Chili más conocido como Caspicara.

La obras más antigua que se encuentra en el museo es un cuadro del siglo XVI  de autor anónimo , que hace referencia a la Virgen de Guadalupe de España ,esta obra fue enviada a Quito por el rey Carlos V desde Europa .

Muchas otras magníficas obras se encuentran en el museo pero la gran mayoría de ellas están deterioradas.La notable acústica del Santuario lo convierte en un espacio solicitado para conciertos y eventos.